La Guía para orientarse hasta elegir el mejor arado para tractor
Completa y Redactada por verdaderos expertos de maquinaria para tractores

    1. Introducción

El arado es una máquina que permite volver a llevar el terreno a su estado inicial después de una rotación de cultivos y prepararlo para el procesamiento posterior o directamente para la siembra. La profundidad de trabajo varía desde la más superficial de 10-20 cm hasta la más profunda de 50-60 cm, dependiendo del propósito del procesamiento.

Históricamente, el arado es uno de los procesamientos más antiguos, realizado anteriormente con arados monosurco tirados por caballos o bueyes. Inicialmente, el arado, un instrumento de madera, servía para perforar un surco en el suelo y simplemente rompía una primera capa de suelo. Gracias a modificaciones sucesivas se ha añadido la importante funcionalidad del volteo del terrón.

Con el paso del tiempo y gracias al desarrollo tecnológico, se ha pasado de una tracción animal a una de tipo mecánico, gracias a la modernización de la agricultura. Se ha pasado de arados a una sola reja a arados con vertedera reversible, y posteriormente hidráulicas, que permiten una mayor velocidad de trabajo y profundidad.

Hasta la fecha, sobre todo en las grandes explotaciones agrícolas con grandes extensiones de terreno, las máquinas agrícolas arrastran arados de hasta 15 rejas por lado para cubrir distancias más grandes y mayores porciones de terreno a la vez.

    2. Componentes principales del arado

Un arado está compuesto por una estructura portante a la que están conectados los órganos de trabajo (reja y vertedera), el dispositivo de ajuste de la profundidad y de la inclinación lateral y el enganche para tractor. Este último puede ser de diferentes categorías dependiendo del tamaño de los pasadores y los agujeros.

1. Cama (estructura de soporte)
2. Dispositivo de enganche (enganche de tres puntos)
3. Dispositivo para la regulación de altura (permite ajustar las diferentes profundidades de trabajo)
4. Dispositivo de ajuste lateral (permite la inclinación lateral)
5. Cuchilla o cuchillo (permite cortar verticalmente el terreno aún no labrado; no siempre está presente)
6. Cincel (sirve para entrar en el suelo)
7. Reja (permite el corte horizontal del terrón)
8. Vertedera (permite el vuelco lateral del terrón)
9. Extensión de la vertedera (facilita el vuelco)

    3. Labor del suelo: arado

El arado es el primero de los trabajos preparatorios del terreno para preparar la siembra. El arado para tractor forma parte de las llamadas máquinas de explotación agrícola y es una herramienta que puede clasificarse como volteadora, ya que realiza una acción combinada de corte, elevación y volcado de una porción de suelo. El objetivo es invertir las capas y mezclar el suelo.

Para obtener el mejor resultado, es necesaria la combinación de varios factores, tanto del suelo como de la máquina. La condición óptima para el procesamiento es cuando el suelo está en templado, es decir, cuando su nivel de humedad permite un procesamiento con el mínimo esfuerzo y el mejor resultado posible. Otros factores son el número de componentes que trabajan, la profundidad y la anchura de trabajo.

Una distinción importante del procesamiento con arados modernos es entre dentro del surco y fuera de surco:

• Fuera de surco: el tractor está posicionado con las cuatro ruedas en el terreno sin labranza;
• Dentro del surco: el tractor se coloca con dos ruedas en el suelo sin labrar y dos ruedas en el surco hecho por el paso anterior, entonces se inclina hacia el suelo ya labrado.

Hoy en día, con el uso de arados y tractores cada vez más grandes y pesados, se ha difundido la suela de arado que consiste en el progresivo aplastamiento y endurecimiento del fondo del surco operado por la reja. Con el paso del tiempo y las estaciones, la suela no permite el paso de agua, raíces y nutrientes dentro del suelo, afectando a los cultivos. Para solucionar este problema peculiar pero común, es necesario variar, con cada rotación de cultivo, la profundidad de trabajo.

Además de la arada clásica, otro procesamiento muy utilizado mediante el uso de arados monosurco (mucho más grandes que los tradicionales) es el desfonde. El arado trabaja entre 80-120 cm dentro del suelo y se utiliza tanto para la roturación de tierras no cultivadas durante más de 10 años, como para la plantación de cultivos arbóreos como viñedos, olivares o huertos de manzanas.

    4. Tipologías

Existen varios tipos de arados que se utilizan según las características del terreno y las condiciones edafoclimáticas. De hecho, los arados se pueden clasificar según el número de vertederos, el tipo de operación y el movimiento. Las más populares son:

• Arado de reja corta (monosurco): utilizado principalmente en suelos suaves, limosos y arenosos para trabajos poco pesados;
• Arado de vertedera helicoidal: uno de los más populares en Italia, se utiliza en suelos con alta presencia de coloides minerales con una textura muy fina. La reja corta el terreno y la vertedera helicoidal desliza el terreno lateralmente, generando así el surco. Esto permite acompañar y voltear el terrón de una manera no demasiado abrupta para evitar el desmoronamiento;
• Arado de vertedera reversible: permite voltear terreno según el sentido de marcha para una mayor velocidad de trabajo en comparación con el tradicional monosurco fijo. Para cambiar la dirección del volteo se efectúa una rotación de 180° al final del campo.