La Guía para orientarse hasta elegir los mejores vibrocultivadores
Completa y Redactada por verdaderos expertos de maquinaria para tractores

    1. Introducción

El vibrocultivador es una herramienta utilizada para preparar el suelo y eliminar las malas hierbas de segundo crecimiento. Trabajando en la parte superficial del terreno a 5-15 cm de profundidad logra romper y refinar ulteriormente los terrones que quedan de las elaboraciones anteriores, como la labor con rotocultores, y por este motivo se considera una herramienta de división.

Este cultivador no requiere elevadas potencias de fuerza motriz y de elevación pero se parte de 40 caballos ya que puede alcanzar anchuras de trabajo, en los modelos plegables, hasta los 4 metros. Además, los muelles están dispuestos en filas que normalmente son entre 3 y 5, pero pueden ser hasta 9 filas, aumentando así su peso total.

    2. Componentes principales:

El vibrocultivador está compuesto por un enganche de tres puntos y un chasis principal (plegable un transporte más facil en los modelos más anchos) al que se instalan los dientes. En la parte superior, los dientes están compuestos por un muelle enganchado al chasis, que genera el efecto vibrante, y terminan con una reja.

Algunos modelos están equipados con un triturador o rodillos traseros, que hacen que el suelo sea lo más uniforme posible, y con ruedas (de acero, hierro o goma) que ajustan la profundidad de trabajo. En las máquinas más pequeñas, la profundidad se puede ajustar directamente desde el enganche de tres puntos, mientras que en los modelos más grandes y modernos también se realiza a través de pistones hidráulicos.

1. Enganche de tres puntos
2. Chasis (tubulares conectados con celosías de hierro)
3. Dientes
4. Muelle (con refuerzo si la máquina está destinada a trabajar sobre terrenos duros, pero normalmente comporta una disminución del efecto vibrante)
5. Reja (reversible o de lanza)
6. Ruedas (ajustables manualmente mediante palanca o conectadas a los distribuidores hidráulicos)

    3. Labor del suelo

El vibrocultivador realiza trabajos superficiales, ya que penetra en el suelo dentro de los 20 cm, y complementarios, ya que prepara el lecho de siembra e incorpora los residuos de cultivos anteriores en la capa más superficial del suelo.

Gracias a la vibración y al movimiento transversal y longitudinal de los muelles, combinados con la elevada velocidad del tractor, la herramienta entierra los fragmentos más pequeños y saca a la superficie, rompiéndolos, los más grandes. De esta forma se consigue una germinación de la semilla casi perfecta.

Algunos modelos pueden tener una configuración diferente y transformarse en escardadoras. Esto es posible volviendo a posicionar los dientes a lo largo del chasis para unirlos en 2 o 3 grupos: de esta manera, los dientes estarán cercanos en el mismo grupo, pero los distintos grupos estarán espaciados según el espacio entre las filas de cultivo.

La escardadora desempeña una función diferente a la del vibrocultivador, ya que rompe la corteza del suelo y elimina las malas hierbas aún más superficialmente. Por lo tanto, haciendo pequeñas modificaciones al vibrocultivador, se pueden realizar dos trabajos diferentes utilizando la misma máquina.

La escarda es un procesamiento consecutivo, posterior a la siembra, que permite romper la capa más superficial del suelo entre las filas de cultivos como el maíz, el girasol o las patatas. A diferencia de otras labores que tienen cadencias estacionales, la escarda se efectúa cuando es necesario y con las plantas ya en el período vegetativo, es decir, cuando crecen tallo y hojas. Se puede llevar a cabo una sola vez en cultivos como el maíz o repetidamente con hortalizas, como la cebolla, incluso con la planta ya bien desarrollada.

Por lo tanto, los objetivos son:

• romper la capa superficial para ajustar la humedad del suelo: esto es especialmente útil cuando la primera capa de suelo está particularmente expuesta a un clima árido y desea reducir la evaporación del agua, reteniendo la humedad;
• eliminar las malas hierbas de manera mecánica y no de manera química: esta acción está indicada sobre todo para producciones monocultivos prolongadas (es decir, cuando en el campo se siembra siempre lo mismo durante muchos años). Con el tiempo, las malas hierbas, que también son diferentes según el tipo de cultivo, se vuelven resistentes a los agentes químicos: en este caso, eliminarlas de manera mecánica es la mejor opción.

    4. Tipologías

Las diferencias principales entre los vibrocultivadores son, además de la cantidad de filas y el tipo de desplazamiento, de arrastre o llevado, los dientes aplicados al chasis.

En particular, hay varias combinaciones entre los muelles y las rejas (además de varios accesorios como los refuerzos para muelles, los soportes y los pernos) que componen los dientes. Los muelles que se pueden aplicar al vibrocultivador se dividen principalmente en dos tipos: muelle flex (que a su vez tiene tres subclases: recta, miniflex y superflex) y muelle reforzado o tipo italia/italiano. Las rejas pueden ser reversibles o de lanza: cada una puede ser también recta, curva o doble.